La FIFA ha aplicado reducciones sucesivas en los precios del partido inaugural del Mundial de Clubes 2025 debido a la escasa demanda. Desde que se pusieron a la venta en diciembre, los boletos más baratos pasaron de 306 euros a tan solo 50 euros, las entradas “” pasaron de 525 euros a 125 euros y las “VIP” de 725 euros a 260 euros.
El partido de apertura se jugará en el Hard Rock Stadium de Miami, con capacidad para unos 65 000 espectadores. A pesar de la presencia de figuras como Leo Messi en el Inter de Miami, la FIFA reconoce que aún quedan “decenas de miles” de entradas sin vender a cuatro días del inicio del torneo.
FIFA
Este escenario preocupa al organismo
La FIFA ha implementado precios dinámicos, modificándolos según la demanda. La medida se ve como un intento de incentivar la asistencia en estadios vacíos. La mayor parte de los tickets aún disponibles corresponden al debut del Inter de Miami contra Al Ahly, mientras que otros partidos, como Real Madrid‑Al Hilal programado para el 18 de junio, presentan mejor aceptación.
Estadísticamente, el mayor interés proviene de países como Estados Unidos, México, Argentina, Brasil, Alemania y Japón. Además, encuentros protagonizados por equipos de gran calado como Real Madrid o Boca Juniors gozan de mayor tirón.
El riesgo
Una imagen de capacidad insuficiente podría empañar la reputación de esta primera edición del nuevo formato
Este episodio supone una importante prueba para la FIFA. El Mundial de Clubes 2025 busca consolidar un nuevo formato con 32 equipos y una bolsa de premios de casi 900 millones de euros, superando la antigua Copa de Confederaciones. Lograr estadios llenos, especialmente en partidos inaugurales con estrellas internacionales, se considera vital para validar y fortalecer esta transformación.
Mientras el torneo progresa, la FIFA confía en que la venta de entradas en fases posteriores mejore. El organismo espera que el impulso generado por partidos con clubs europeos de alto perfil compense el lento arranque. Además, confía en que la atención de medios como DAZN y plataformas de streaming contribuya a popularizar la cita en los próximos días.
La decisión de reducir precios hasta un 84 % revela una señal clara. El Mundial de Clubes ha tenido un comienzo débil en cuanto a afluencia. El desafío para la FIFA no solo es llenar gradas, sino asegurar que este nuevo modelo consolide su reputación global. Las próximas semanas serán determinantes para ver si la estrategia de rebajas y los partidos de mayor atractivo consiguen revertir esta tendencia y dar estabilidad a la competición.