¿Qué se ha dicho?
Que el consumo de semillas de chía sirve para perder peso y eliminar la grasa abdominal.
¿Qué sabemos?
Las semillas de chía, por sí solas, no tienen la capacidad de ayudar a perder peso a las personas que las consumen habitualmente
Se ha viralizado una tendencia en TikTok que recomienda a los s tomar semillas de chía con agua para perder peso. Los vídeos acumulan millones de visualizaciones, y algunos de ellos prometen una pérdida de hasta 3 kilos por semana.
Es ENGAÑOSO. Las semillas de chía son un alimento con un alto contenido en fibra, lo que favorece la saciedad y el tránsito intestinal. Aun así, ningún alimento por sí solo es suficiente para perder peso. Perder peso depende del conjunto de la dieta, de la fisiología y del estilo de vida de cada persona
ENGAÑOSO
“Las semillas de chía te hacen perder peso rápidamente”
La chía (Salvia hispanica) es una planta originaria de América Central. Sus semillas se han popularizado como un producto clave para la pérdida de peso y también como un superalimento, por su perfil nutricional: son ricas en ácidos grasos omega-3, proteínas, antioxidantes y fibra soluble e insoluble. Fueron autorizadas por la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) en 2013 en la UE.
“Algunos alimentos, como las semillas de chía, pueden favorecer la saciedad y mejorar el tránsito intestinal gracias a su alto contenido en fibra”, explica a Verificat Oriol Comas, profesor del área de Tecnología de los Alimentos de la Universidad de Barcelona (UB). Los vídeos virales recomiendan ponerlas en remojo, porque así la fibra soluble se expande, forma una especie de gelatina y quien la consume mantiene la sensación de saciedad. “Pero eso no implica que por sí solas provoquen una pérdida de peso”, concluye el experto.
Los diversos metaanálisis y revisiones sistemáticas que han analizado el efecto que tienen estas semillas en personas con sobrepeso y obesidad respaldan las palabras del experto. En general, encuentran que su consumo reduce la circunferencia abdominal, pero no el índice de masa corporal (IMC) ni el peso. Una de ellas destaca que es necesario estudiar esta intervención en el contexto de una estrategia de salud más completa, que incluya modificaciones en la dieta, el ejercicio y el estilo de vida.
Otro estudio, que analiza los cambios en personas con sobrepeso tras 12 semanas de ingesta de semillas de chía, tampoco ha observado que reduzca el peso
Ningún alimento, por sí solo, contribuye a perder peso
“La pérdida de peso se produce solo cuando hay un balance energético negativo, es decir, cuando se consumen menos calorías de las que se gastan”, explica Àlex Blasco, dietista-nutricionista del Servicio de Dietética y Alimentación del Hospital de Sant Pau de Barcelona, consultado por Verificat. El cuerpo quema calorías realizando sus funciones básicas, como respirar, digerir alimentos y mantener la temperatura corporal, por ejemplo. Es el llamado metabolismo basal. También se consumen calorías al realizar actividades físicas como caminar, correr o practicar otros deportes, y se ganan con la alimentación.
En consecuencia, hay dos maneras de reducir el peso corporal: aumentando la quema de calorías (haciendo ejercicio físico) o disminuyendo su consumo (a través de los alimentos). En este sentido, el experto recalca que la chía “es una semilla y es muy calórica, y su consumo debe vigilarse y reducirse si se quiere hacer una dieta de restricción calórica”.
Sea como sea, ningún alimento por sí solo nos hará ganar ni perder peso, tal como recuerda el Manual de Nutrición y Dietética. “El valor nutricional de la dieta depende, por tanto, de la mezcla total de los alimentos que la componen y de los nutrientes que aporta, y debe ser valorado a lo largo de varios días”, señala el documento.
Dietas milagro y riesgo para la salud mental
La afirmación de que comer semillas de chía puede hacer perder mucho peso en pocos días forma parte del discurso recurrente de las llamadas dietas milagro, que prometen resultados rápidos y extraordinarios, a menudo sin base científica ni seguimiento médico. Este tipo de mensajes tiene consecuencias negativas importantes para la salud física y mental, especialmente en la etapa adolescente, y la Academia Española de Nutrición y Dietética las considera “peligrosas”.
Los mensajes simplistas y virales en redes sociales, especialmente cuando van dirigidos a un público joven, pueden fomentar una relación poco saludable con la comida y el cuerpo. Según el Canal Salut de la Generalitat de Catalunya, el bombardeo constante de contenidos que idealizan cuerpos delgados y dietas restrictivas puede favorecer la aparición o el empeoramiento de trastornos de la conducta alimentaria (TCA), como la anorexia, la bulimia o el trastorno por atracón.
Además, el hecho de presentar un alimento concreto como una solución única y eficaz para perder peso puede desviar la atención de pautas esenciales para la salud como una alimentación equilibrada, la actividad física regular y el acompañamiento profesional cuando sea necesario. No existen alimentos milagrosos ni superalimentos, como ya hemos explicado anteriormente en Verificat, y ningún producto por sí solo puede provocar una pérdida de peso significativa y sostenida. Confiar en mensajes virales que prometen resultados rápidos puede generar frustración, efecto rebote y perjuicios para la salud física y emocional.
Esta verificación es fruto de la colaboración entre Verificat y Gisela Ibáñez, becada por el programa Teen Fact-Checking Network (TFCN).